Testimonio de la FLTA Angelina Davila, teaching assistant en el St. Mary’s College of Maryland
El programa FLTA empezó a ser parte de mis objetivos en el 2014 cuando empecé la carrera de profesorado. En ese momento no me imaginaba cómo esta experiencia cambiaría mi vida, la manera como veo el mundo y cómo me veo a mi misma como persona, como profesional y como representante de mi cultura.
Lamentablemente, dadas las circunstancias actuales, muchas cosas cambiaron en este semestre, y las clases de español que impartía en St. Mary’s College of Maryland pasaron a la modalidad remota, con videollamadas grupales en nuestro habitual horario de clase. Si bien era una experiencia completamente nueva para mí, ya estaba familiarizada con los estudiantes y pudimos adaptarnos muy bien, además de conocernos aún más, compartiendo nuestros puntos de vista y experiencias en la situación actual.
Puedo decir que aproveché al máximo mi experiencia en Estados Unidos, conocí no solo la cultura de los americanos, sino también la de personas de diversas partes del mundo, mientras compartía mi cultura con todos ellos.
Lamentablemente, dadas las circunstancias actuales, me vi en la necesidad de regresar antes a casa y dejar el pequeño paraíso en Maryland al que llamé hogar por casi ocho meses. En ese momento contacté a Fulbright y la respuesta de la Comisión fue inmediata. El apoyo de todos fue incondicional y juntos buscamos la manera más segura de volver a casa. El trabajo de la Comisión Fulbright Uruguay fue impecable, y sé que no descansaron hasta asegurar que había regresado a mi país con seguridad.
Mi agradecimiento es eterno, no solo por haberme regresado a mi país y haber cuidado de cada detalle que asegurara que mi experiencia fuera la mejor posible, sino también por haberme permitido ser parte de Fulbright y todo lo que eso significa y representa para mí.